Urgencias en las especialidades médicas de mayor riesgo de contagio

El virus que produce el COVID-19 se transmite por la propagación de gotas al estornudar, toser o hablar. Algunas especialidades de la atención médica, tales como la Odontología, la Oftalmología o la Otorrinolaringología, debido que tratan las vías aéreas superiores, boca y ojos, involucran un riesgo mayor de exposición, por lo que es conveniente resolver las consultas a distancia. Sin embargo, ciertas situaciones de salud podrían presentarse de repente y requerir ser atendidas en consultorio dentro de un periodo de tiempo razonable (horas) para evitar complicaciones.

Algunos ejemplos de situaciones que podrían configurar una urgencia odontológica son: dolor en la zona de la muela de juicio, dolor importante luego de la extracción de pieza dentaria, rotura del diente o traumatismo con dolor, retiro de sutura después de la extracción, hinchazón importante en la cara, lastimaduras causadas por los alambres de ortodoncia, flemón o dolor agudo con fiebre.
En estos casos es conveniente no postergar la consulta, y también tener en cuenta que de presentar fiebre mayor de 37.5, los pacientes serán derivados con posterioridad a la resolución de la urgencia, para continuar con protocolo correspondiente a detección de COVID-19.

En cuanto a las urgencias oftalmológicas, muchas son las situaciones, pero se pueden destacar la disminución brusca de la agudeza visual -ya sea en cantidad o en calidad (imágenes deformadas)-dolor ocular intenso, visión doble, trauma, quemaduras, entre otras.

En otorrinolaringología, podrían mencionarse: pérdida súbita de audición, complicación de una otitis o sinusitis, complicación luego de una cirugía, hemorragias nasales que no se detengan espontáneamente, infecciones cervicales, entre otras.
Para tales situaciones de urgencia, los profesionales y las instituciones están extremando las medidas de precaución con el uso de equipos de protección adecuados. Sin embargo, es clave aprender a reconocer cuándo estamos ante una urgencia y cuándo no, para evitar riesgos de exposición innecesarios.

Consulta online con profesionales de cartilla

Mientras esté vigente el período de aislamiento social obligatorio, nuestros prestadores de cartilla estarán habilitados para brindarte atención en especialidades médicas, de psicoterapias, o psiquiatría, mediante plataformas digitales.

En todos los casos, el medio a utilizar y el horario de la consulta deberá ser consensuado previamente entre el prestador y el paciente.

Si el profesional te indica medicación, podrá enviarte una captura de la receta para que presentes en la farmacia de cartilla más cercana a tu domicilio.

Para acceder a este servicio deberás brindar tu conformidad a través de un consentimiento informado. La confidencialidad de la consulta virtual, no será en ningún caso responsabilidad de Swiss Medical Medicina Privada.

La prestación de este servicio está sujeta a la conformidad de cada profesional.

CONSULTAS MÉDICAS

Esta modalidad admite 2 (dos) consultas mensuales por profesional y estará disponible sólo para especialidades médicas.

CONSULTAS DE PSICOTERAPIAS Y PSIQUIATRÍA

Este servicio admite 1 (una) sesión semanal y es para quienes ya se encuentran en tratamiento.

COVID-19: Nuestra salud emocional

El aislamiento físico ha tenido un gran efecto en casi todos los aspectos de nuestras vidas. Han cambiado mucho las cosas en muy poco tiempo: la rutina de cada día, la manera de vincularnos, y hasta el modo en que cuidamos nuestra salud. Todos tenemos dudas sobre lo que podría suceder en el futuro, y cada uno lidia con eso de diferentes formas. En este contexto, desarrollar estrategias para encontrar el bienestar emocional se vuelve fundamental.

Aquí algunas recomendaciones que tienen efectos probados:

  • Es natural sentir tristeza, enojo, confusión o miedo ante una situación de crisis, lo desconocido, o un cambio repentino. Pero si dejamos que estos sentimientos nos dominen, nos exponemos al agotamiento y nos volvemos menos capaces de afrontar los desafíos. En lugar de ello, podemos apelar a otros recursos emocionales para encontrar calma, como por ejemplo, hablar de lo que sentimos con personas de nuestra confianza. Sentirse cerca de los demás reduce la ansiedad.
  • El no poder continuar con la propia rutina habitual nos puede hacer sentir que perdemos la sensación de control. Por eso organizarse y establecer nuevos hábitos, permite encontrar mayor estabilidad y una dirección para lo que hacemos a diario.
  • Los sentimientos de desánimo pueden surgir en mayor medida después de cierto tiempo de permanecer en nuestras casas, e incluso acentuarse con la llegada del invierno. Para contrarrestarlos, es importante encontrar un balance en las actividades de todos los días, por ejemplo, destinando un tiempo para el ejercicio físico; otro para relacionarnos con personas; otro para trabajar, estudiar o concentrarnos en algo que nos hubiéramos propuesto o simplemente descansar. Y muy importante, un tiempo para seguir en contacto con la luz solar.
  • El distanciamiento físico puede provocar sensación de soledad, especialmente en personas que viven solas. Hay que tener en cuenta que muchos otros están en la misma situación y que podemos encontrar nuevas formas de vincularnos, tal vez con vecinos o bien con nuestros afectos de siempre por medios virtuales. Cuidar nuestras relaciones es algo importante en los momentos de crisis porque mantiene y estrecha los vínculos, beneficiando a ambas partes.
  • Aceptemos y comprendamos las emociones que se presentan en vez de luchar contra ellas, ignorarlas o juzgarnos por sentirlas. Darse permiso para ser vulnerable, es una parte de nuestra vida emocional y una forma de seguir aprendiendo sobre nosotros mismos. Cuando aceptamos una emoción en vez de ocultarla, estamos en mejores condiciones de afrontar la situación, incluso es posible que la emoción se empiece a disolver.
  • Ante una situación difícil, el mero hecho de detenerse y respirar, nos puede tranquilizar. Hacer una pausa antes de reaccionar es importante para poder elegir cómo queremos hacerlo. Y recordar que siempre se puede recurrir a las habilidades que utilizamos en el pasado, esas que nos ayudaron a manejar las adversidades en otros momentos difíciles.
  • En este momento, todos necesitamos aprender a poner un límite a las preocupaciones (que no es lo mismo que ignorar los problemas). Hay tantas formas de hacerlo como personas. Un consejo entre muchos posibles, es invertir al menos 5 minutos diarios en valorar la naturaleza. Esto aumenta nuestro bienestar emocional, pudiendo reducir la ansiedad e incluso tener efectos benéficos sobre la tensión arterial.
  • Si aparecen sensaciones de monotonía o aburrimiento, es bueno apelar a nuestra capacidad y la de otros de ser creativos, reorganizando y creando nuevos hábitos que nos hagan sentir bien. Recordá que todos, tanto niños como adultos, necesitamos mantener espacios de juego y divertimento, de contacto con la expresión creativa o incluso con la contemplación artística, ya que promueven emociones positivas que impactan sobre nuestra salud general.
  • Mantenernos activos cada día es más importante ahora. Aun estando dentro de la casa, hay muchas formas de lograrlo, desde tareas del hogar, jardinería, hasta una clase de yoga, danza o ejercicios por internet. Estar en movimiento, hacer ejercicio físico, relaja y genera hormonas que estimulan el sistema inmunitario. Recordá que esto debe acompañarse siempre de una correcta alimentación e hidratación.
  • Es posible que se hayan alterado nuestros horarios de sueño dado que todas nuestras rutinas diarias han cambiado. Sobre este tema en particular, hay muchas recomendaciones en el artículo «Cómo dormir bien en tiempos de COVID-19».
  • El tabaco, el alcohol u otras drogas no son una opción para lidiar con las emociones. Si nos sentimos abrumados, lo mejor es buscar ayuda profesional.

  ¿Cuándo terminará todo esto? Nadie lo sabe, lo que sí sabemos es que lo que hayamos aprendido en este tiempo quedará con nosotros como herramienta para toda nuestra vida.

Asesoró Lic. Alma Vanina Estrella. Psicóloga. M.N. 41.217. Editora de Publicaciones de Swiss Medical Medicina Privada.

Nuestra contribución en las investigaciones

Recientemente, confirmamos nuestra participación en los ensayos clínicos impulsados por el laboratorio internacional Pfizer para desarrollar la vacuna contra el COVID-19, el cual se encuentra en fase clínica avanzada y se probará tanto en Estados Unidos como en nuestro país. 

Asimismo, desde mayo estamos trabajando en las investigaciones de plasma de convaleciente para evaluar la eficacia de este tratamiento que podría beneficiar a quienes estén cursando esta enfermedad.  

Conocé más sobre donación de plasma 

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